Cantante

En la habitación, blanca, se despertó. Vio que no tenía sentido lo que había hecho, y se culpaba por ser tan balamente trágica. Era horrible hacer esto, y ver cómo había acabado. Se sentía mal, no quería verse como esas personas psiquiátricas que llegan a esos pensamientos por un mal juego de genes, o mala educación, mal entorno social.. No era ella quién había vivido mal, ni se había criado en la pobreza, ni quien habia faltado al colegio o instituto.

Empezó a recordar esa canción. La que tanto le gustaba cantar. Luego la otra, la que le recordaba a esos momentos con sus antiguas amistades. Cantó una tercera, la de moda... y luego... Luego, empezó a tararear, a componer mentalmente. Empezó a conjugar palabras, confeccionándolas con la melodía, y sonaba muy bien. Sabía que con la guitarra y el piano, instrumentos que aprendió a tocar, básicamente, en las clases de talleres del barrio. Se veía como Lana Del Rey, Lady Gagá, Taylor Swift, Britney Spears en sus mejores momentos,  o como las míticas Tina Turner o Madonna. Y le gustaba. Era mejor que lo que había estado viviendo: ir con ese hombre y esas personas desagradables... ¡No!

Se levantó. Ya estaba bien. Golpeó la puerta, llamando a la enfermera. Ya quería el alta, dejar el hospital, recoger las cosas del piso, y volver a su casa. No era lo ideal, era sólo, para poder pasar un tiempo, componer, encontrar el resto de la banda para poder grabar, actuar, cantar y volver a disfrutar. Y luego, lo demás... 

Y salió. Pero, ¿realmente fue cantante? ¿Creó una banda, hicieron discos y se fueron de gira? No. Realmente, volvió a casa, pero las aficiones no siempre son trabajos, y, en su caso, volvió a trabajar, pero como celadora en hospital, y sí, cantaba en fines de semana pero versiones de canciones, en acústico, piano o guitarra, para un mini público. Y a veces, de vez en cuando, se oían melodías nuevas, diferentes, que no encontraban en Youtube ni en ningún disco...