Educadora especial

Se despertó. Y empezó a verlo claro: "ese hombre no es normal, no sabe ni expresarse y sólo critica y atormenta si no eres de su gusto. Y las personas normales no hacen eso. Así que..."

Se acordó del sueño de ser profesora, de las conductas a corregir, de ayudar a la adaptación, comprensión, humanización y realismo. Y era tan joven... Le había gustado mucho "El milagro de Ana Sullivan", y el mensaje transmitido. Y entonces pensó que debía redirigirse... No podía quedarse con esta imagen, estos pelos, está falta de gusto vistiendo, por cómoda que fuese, y no hacer nada.

Recordó que le gustaría educar. Y había tantas opciones. Y también sabía que había mucha gente difícil, no sólo por carácter, sino problemas mentales, comprensión, etc Educación especial, eso es lo que debía estudiar. Sería difícil, pero debía realizarla. Se sentiría muy bien, consagrada. Como aquella chica que triunfó en Granada, o eso le habían contado en la Facultad de Psicología, algo que no era para ella, ya que no creía en tantas ideas y simplificaba demasiado (y prefería el bar)...

Cambio, necesitaba cambio. Y a bien. Ya tenía ganas de salir y reiniciar de nuevo.